miércoles, 5 de marzo de 2014

Revestimiento Exterior

¿Qué es un  revestimiento exterior?

Los revestimientos de exterior de madera son elementos superficiales o lineales utilizados principalmente en el revestimiento de fachadas. Además de decorar y proteger la estructura, pueden aportar alguna característica suplementaria como la de aumentar el aislamiento térmico o acústico.

Tipología por forma:

Atendiendo a la forma, los revestimientos de exterior pueden clasificarse en superficiales (tableros o paneles) y lineales o lamas.

Tipología por el material:

Atendiendo al material, los revestimientos de exterior pueden clasificarse en revestimientos de madera maciza, de tejuelas de madera, de madera laminada, de madera tratada, de tableros contrachapados, de tableros contrachapados de alta densidad y de tableros estratificados fenólicos, también llamados compactos.

-Revestimientos de madera maciza: La madera maciza es el material más tradicional para elementos lineales. Dependiendo de la especie pueden presentar problemas de durabilidad, por lo que se hace necesario dotarlos de un tratamiento protector en profundidad y/o un acabado protector (una pintura de poro abierto o un lasur con filtro ultravioleta). El corte de la madera más conveniente para exterior es el radial (la durabilidad es máxima); pero, como con este corte se obtienen pocas piezas, se acostumbra a cortarla tangencialmente, proceso del que se obtienen piezas con zonas de albura y duramen.

-Revestimientos de tejuelas de madera: Las tejuelas o tejas de madera son piezas procedentes del corte radial de rollizos; son tablillas planas o ligeramente biseladas.

-Revestimientos de madera laminada: La madera utilizada para la madera laminada puede estar tratada o ser de durabilidad natural adecuada. Se emplea en forma de “rodajas” de piezas mayores de madera laminada con adhesivos de exterior.

-Revestimientos de madera tratada: Se trata de un tipo de madera cuya durabilidad natural frente a agentes bióticos se ha modificado mejorándola mediante la introducción de productos protectores o mediante la aplicación de elementos externos como calor y otros, modificando así la pared celular y mejorando sus propiedades en cuanto a durabilidad y estabilidad dimensional.
Actualmente, en Alemania, Austria y los países nórdicos se utiliza cada vez más para estos revestimientos madera modificada térmicamente o torrefactada. Este innovador material se obtiene por choques térmicos (160-215ºC) en condiciones de ausencia de oxígeno. El proceso de modificación térmica constituye un tratamiento alternativo de la madera maciza, no químico, cuya principal ventaja es la mejora tanto de la durabilidad frente a ataques biológicos como de la estabilidad dimensional. La madera torrefactada puede competir por precio y calidad con las frondosas tropicales y con las coníferas tratadas en autoclave.

-Revestimientos de tableros contrachapados: Los tableros contrachapados (Figura 25) se empezaron a colocar en fachadas a partir de los años 40 sustituyendo al entablado que habitualmente se utilizaba para esta función. Los primeros tableros estaban rasurados mediante sobrepresión e imitaban al entablado clásico, permitiendo diferentes texturas: unas más toscas, como aserrado o escobillado y otras lisas, en relieve, o con una capa sobrepuesta de densidad media especial para pintar.
Estos tableros requieren un encolado fenólico o melamínico resistente al exterior, un acabado mejorado y una especial atención a los cantos, que constituyen los puntos más críticos frente a la humedad.

-Revestimientos de tableros contrachapados de alta densidad: Los tableros contrachapados de alta densidad surgieron como respuesta a la necesidad de utilizar, por su buena resistencia, homogeneidad y estabilidad dimensional, tableros contrachapados en el exterior. En estos tableros, el encolado se realiza con resinas fenólicas o melamínicas resistentes a la intemperie que impregnan totalmente las chapas de madera. En el proceso de encolado se aplica calor y presiones de unos 35 kg/m2 o más. La densidad de estos tableros suele ser de al menos el doble que el tablero contrachapado normal, lo que causa que sea difícil perforarlos con herramientas manuales. En España comenzaron a tener un gran uso a partir de los años 80 del siglo pasado.

-Tableros estratificados fenólicos o compactos: Tiene un aspecto similar al tablero de alta densidad y suelen fabricarlos las mismas empresas, aunque son productos que en cuanto a su composición nada tienen que ver. Un tablero estratificado fenólico consta de un alma de fibras de madera o papel tratadas con resinas fenólicas termo endurecidas y comprimidas a altas presiones y temperaturas, con caras de chapa de madera u otro material. El acabado es baquelizado cuando va al exterior. La baquelita es una resina fenólica que se
transforma en un plástico termoestable. En ambos casos (contrachapados de alta densidad y baquelizados) los tableros van fijados sobre una estructura de rastreles de madera o metálicos. Su acabado superficial admite muy bien la pintura, lo cual favorece una amplia paleta de colores a la hora de componer fachadas



                    Revestimientos de madera maciza


                Revestimientos de tejuelas de madera


                Revestimientos de madera laminada


                 Revestimiento de madera tratada



             Revestimiento de tableros contrachapados


 Revestimientos de tableros contrachapados de alta densidad



           Tableros estratificados fenólicos o compactos